Una asociación de trasplantados reclamó al gobierno nacional la normalización de la entrega de medicamentos que desde hace meses no llegan a tiempo, y si lo hacen, no son los recetados. “En vez de tomar una pastilla, tienen que tomar seis”, explican. Hay alrededor de 60 personas de Venado Tuerto y la zona. La entrega depende del Incucai, que es el organismo encargado de repartir los medicamentos. “No somos los únicos que estamos sufriéndolo”, dice Miriam Montiel, una de las referentes. Y agrega que las personas que no tienen cobertura médica se ven aún más afectadas.
“Nosotros tenemos que tomarlos todos los días de nuestra vida. Yo tengo que recibir lo que me recetan. Comenzamos teniendo el problema con la forma, porque de pronto nos mandaban otra cosa, con menos miligramos. Después recibíamos otra marca, arbitrariamente, sin consultar a nuestro médico”, explica Montiel.
Se trata de medicación fundamental que permite que el cuerpo no rechace los órganos. En algunos casos, las irregularidades podrían provocar la muerte de los pacientes. “Yo me trasplanté con mi médico que me conoce, sabe mi patología. Él me medicó de acuerdo a mí físico y mi proceso. ¿Cómo una persona que no me conoce me cambie la medicación, el nombre y la graduación? Obviamente que afecta: muchos mareos, muchos vértigos”, señala.
Piden, además, que los medicamentos sean enviados a Venado, para evitar los costos que implica viajar a Rosario. “Después comenzamos a recibirlo cada quince días. Hace unos meses se agravó la situación, porque cada vez que íbamos nos daban con retraso. Eso tenemos que ir a buscarlo a Rosario”, aduce, y agrega: “en enero de 2017 logramos la aplicación de la ley provincial 13397, que estaba aprobada hace tiempo. Ahora pueden viajar gratis, pero además del trastorno del traslado, no tienen cubiertos los viáticos. “No estamos jugando ni hacemos esto porque se nos da la gana. No pudimos hablar con nadie. Se mandaron cartas al Incucai. No recibimos ninguna respuesta”.
