“La autopista no se negocia” era el mensaje que la bandera sintetizaba. Fueron más de 1.500 personas las que se concentraron ayer en Rufino para reclamar la continuidad del proyecto de autopista. Desde que asumió el gobierno nacional, el tramo que va de Venado Tuerto a Rufino los rumores sobre un posible cambio en el proyecto que dejaría
afuera ese tramo, crecieron y se intensificaron sin que ningún funcionario saliera a desmentirlo.
La inmediata respuesta de la comunidad rufinense obligó a que el intendente local, integrante de Cambiemos, saliera a respaldar el pedido y marcara diferencias con el gobierno de Mauricio Macri. Ayer, durante la protesta, se colocaron cruces de madera en el cruce de la ruta 33 y la 7, en homenaje a las víctimas fatales en accidentes de tránsito. Ese corredor, por donde circula gran parte de las cosechas que van hacia el puerto, es uno de los focos más intensos de muertes y siniestros.
El jueves, el administrador general de Vialidad Nacional, Javier Iguacel, presentó el nuevo proyecto para la autopista. El tramo Venado-Rufino quedaría para una segunda etapa, recién a cumplimentar en 2020. La Coordinadora Autopista Rufino y los vecinos organizados elevaron su reclamo y pidieron que se los mantenga en el orden de prioridades. El funcionario nacional pidió 15 días para poder dar una respuesta.
