En sus informes periódicos el Observatorio del Centro Comercial brinda un panorama de la situación económica de la ciudad. Para esta ocasión, el análisis confirma el ciclo de caída de ventas con la consecuencia de cierre de negocios o la mudanza hacia zonas alejadas del centro para achicar costos. Ezequiel Coelho, uno de sus responsables, agrega que se trata de la medición de abril, es decir, sin tomar el impacto de la corrida y la devaluación del peso.
Coelho apunta que desde hace varios meses se registra una caída en las unidades vendidas y que los comercios para llegar a esas unidades tienen que realizar promociones y, a su vez, absorber buena parte del aumento sostenido de costos. Además, señala que se venía de una cierta tranquilidad luego del mes de octubre, por el día de la madre, que fue el único registro positivo, pero luego empezó a caer y los últimos meses estuvo cerca del 5%.
“Todo lo que tenga mayormente componentes importados y que no sean de primera necesidad, sufrieron un golpe. Joyería y relojería tienen una baja por arriba del 20%. Los materiales para la construcción de un 10%”, afirma. Y completa: “obviamente el tema del dólar y la variación de precios impacta en las personas que hicieron un presupuesto y las tardanzas en las confirmaciones y demás complica toda la situación”.
Por otro lado, plantea que se está produciendo “una fractura de la cadena de pagos, con cheques rebotados”, y que hay comercios que antes financiaban ellos mismos a sus clientes pero “están viendo que tuvieron que reducir esto porque cuesta cobrarle a la gente.” Coelho lo define como “un momento complicado” ya que se detecta una importante suba de precios en casi todos los rubros.
“Gran parte de los aumentos de precios los absorben los comerciantes. Si tuvieran que pasar a precio todos los aumentos que sufren en los costos, en los servicios y proveedores, no venderían nada. Por eso es preocupante”, resume.
