Numerosas organizaciones sociales y políticas nucleadas en el Comité por la Liberación de Milagro Sala realizaron marcharon con antorchas este martes hacia el Hotel Sheraton para agradecer la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al país y reclamaron que la dirigente social jujeña deje la cárcel de Alto Comedero. La CIDH, al igual que otros internacionales se pronunció tiempo atrás por la fin de la detención de la referente.
La Secretaría Ejecutiva de la Comisión, encabezada por Paulo Abrao, recibió a una delegación del Comité por la Libertad de Milagro Sala con quienes mantuvieron una reunión de más de una hora. La organización que encabeza la dirigente, detenida en Jujuy desde enero de 2016.
Los ejes de la multitudinaria movilización fueron: “Basta de presxs políticxs en Argentina. Libertad a lxs presxs políticxs de la Tupac en Jujuy y Mendoza”.
La CIDH consideró en una resolución firmada en diciembre del año pasado que el Gobierno argentino debía cumplir con el mandato del Grupo de Trabajo de Detenciones Arbitrarias de la ONU y liberar “inmediatamente” a Sala.
La manifestación estuvo convocada por el Foro por la Libertad y la Democracia, una entidad que junto con los organismos de derechos humanos el pasado viernes le entregó a la CIDH un informe sobre “las violaciones a los derechos humanos” en la gestión del presidente Mauricio Macri.
Estela Díaz, Mara Brawer, Alejandro “Coco” Garfagnini, María Elena Naddeo, Hugo Yasky, Daniel Catalano, Anibal Ibarra integraron la delegación que fue recibida por la CIDH en el hotel Sheraton.
Al llegar al Sheraton, los manifestantes aguardaron frente al acceso principal, sobre la calle San Martín al 1200, mientras que un grupo reducido de dirigentes y miembros del Comité por la Libertad de Milagro Sala –que tiene 60 sedes en el país y 10 a lo largo del mundo- ingresó al hotel para entrevistarse con las autoridades de la CIDH.
Según informó este miércoles el diario recuperado por sus trabajadores, Tiempo Argentino, la reunión, que en un primer momento estaba pautada para durar 30 minutos y al final se extendió por una hora, sirvió para que acercar denuncias a la Comisión por el encarcelamiento a Sala que “exhiben consistencia, contundencia y coherencia”.
“El secretario ejecutivo de la CIDH (por Abrão) hizo también una reflexión política respecto a los contextos socioeconómicos y de determinados contextos represivos”, escribió el periodista Martín Piqué en Tiempo Argentino, tras hablar con Estela Díaz, secretaria de Género e Igualdad de la CTA de los Trabajadores e integrante del Comité por la Libertad de la dirigente jujeña.
El coordinador nacional de la Túpac, Alejandro “Coco” Garfagnini, al término de la entrevista con la CIDH, se dirigió a los manifestantes desde un escenario montado sobre la calle. “En sus palabras coló un fuerte reclamo a la Corte Suprema”, consignó el artículo de Tiempo”. Y agregó: “Tras el enorme desgaste que le produjo el fallo por el ‘2×1’ aplicado a represores, el máximo tribunal tendrá que resolver –en un plazo no muy largo– sobre dos recursos extraordinarios vinculados a la detención de Sala. Garfagnini adelantó que en los próximos días el Comité por la Libertad de Sala iniciará una campaña ciudadana que consistirá en que 100 mil argentinos envíen cartas postales a la Corte Suprema, cuya sede está en el cuarto piso del Palacio de Tribunales, Talcahuano 550, para exigir la liberación de la diputada del Parlasur”.
“A la Corte Suprema, a esta Corte que está tan desprestigiada, que tiene sobre sí tantos juicios políticos, vamos a pedirle que, por favor, no vuelva a cometer la misma barbaridad que cometió con el 2×1’. Que inmediatamente traten los dos recursos extraordinarios. Que dejen en libertad a Milagro y a los otros compañeros, y que vuelva a haber Estado de Derecho y democracia en la Argentina”, planteó Garfagnini según la crónica de Piqué.
Garfagnini contó además que este mismo martes se pidió formalmente la renuncia “a ese canalla que está usurpando la Secretaría de Derechos Humanos (por Avruj), de quien dijo que “no va a ser recordado jamás como secretario de Derechos Humanos de la Nación sino como un carcelero y un cómplice de las violaciones de los Derechos Humanos en la Argentina”.
