A partir del allanamiento en casas de juegos y domicilios de narcotraficantes en la ciudad, el senador provincial Lisandro Enrico, quién realizó la denuncia, salió a comentar la importancia de que la política se ponga al frente de la lucha contra las mafias vinculadas a la comercialización de drogas y las economías ilegales. Según el senador, todos los sondeos de opinión señalan que la mayor preocupación de la gente pasa por la inseguridad y las drogas. Esas son, según él, las “principales tareas de la política”.
“Es una línea de trabajo: denunciar y comprometer a la dirigencia política en contra de las mafias en todo el país. Lo que pasa en Venado Tuerto y en los pueblos de la región con la penetración de la venta de droga en los barrios a los chicos, eso es un delito de lesa humanidad también, no solo los tradicionales. Eso es arruinarle el futuro. Si no hacemos un embate político en contra de esto vamos a terminar con una sociedad enferma”, comenta Enrico.
Sobre la posibilidad de un paso a retiro de los responsables de las comisarías encargadas de los distritos donde hay bunkes y casas de juego, Enrico aclara: “el año pasado yo hice la primera denuncia y nadie se enteró. Denunciamos seis casas. No se avanzó por las complicidades que hay dentro de la policía y por la falta de aptitud de la justicia. Esta denuncia la hice en Tribunales con mi nombre. Mi estilo de trabajo es hacer que la gente sepa lo que uno hace. Es un deber que tengo como senador. Y es una manera de decirle a la justicia que a la política le interesa que esto no siga creciendo. Hasta ahora miraban todos para el costado”.
Seguidamente, el legislador provincial subraya la interpelación al sistema político. “Yo podría ser senador para aparentar una banca. A mí me pagan lo mismo. Pero no voy a hacerlo. Es injusto cuando un dirigente enfrenta estas mafias, porque saben quién soy yo porque los denuncie, y eso implica un riesgo, no haya un respaldo. Hay tolerancia política y social en todas estas actividades”, dice y agrega que la política finalmente empieza a remarcar lo que la sociedad reclama y que los cambios pueden notarse en el funcionamiento de la justicia. Comenta que es necesario un cambio en la ley para no depender de siete fiscales y evitar la imposibilidad de acción de los mismos. Para eso propone la provincialización de la lucha contra las drogas, dotando de potestades a los 12 fiscales y seis jueces del departamento.
“Tenemos que enfrentar las drogas con toda la justicia. Los TF se va a hacer cargo de todas las causas federales: importaciones, impuestas, causas del estado, contrabando, falsificación. Todos los fiscales tienen que poder hacer un allanamiento rápidamente. Esto es lo que hizo Córdoba. Hay que ir atacando a las mafias para correrlas”, afirma.
Por último, a raíz de las fuertes declaraciones que realizó contra Germán Mastri, acusándolo de “comer asados con los narcos”, y en medio del conflicto del edil venadense con Pablo Rodríguez, excolaborador del senador, Enrico aclara: “yo no tengo perfiles truchos, no es mi estilo de hacer las cosas. No mando a decir las cosas y cuando estoy convencido de algo, voy para adelante”.
