El secretario de Desarrollo Económico, Fabio Fernández, conversó con PUEBLO Regional sobre la situación presupuestaria para este año tras la presentación del documento económico en el Concejo Municipal que implica un monto de 1768 millones de pesos. El cálculo de inflación está entre 30 y 35 por ciento, afirma Fernández. Y explica: “cuando cerramos la ampliación del presupuesto tuvimos que tocar algunas cuentas como el combustible. Ahora volvemos a ver que la inflación va a pegar fuerte en esos rubros. Obviamente, si la inflación se traslada a los salarios, también habrá un impacto”.
Además, el funcionario apunta que un 30% del presupuesto está destinado a educación, salud, seguridad a pesar de que no sean áreas que respondan a las obligaciones del Municipio. “Este gobierno invierte fuerte en esos rubos, aunque no son de nuestra incumbencia directa, sino que responden a la Provincia o la Nación. Pero eso habla de un Estado presente”, indica.
En cuanto a los objetivos principales, Fernández sostiene que se trata de pensar una ingeniería que permita sostener las políticas fundamentales que se propone este gobierno a partir de las mayores exigencias que se generan por un contexto de crisis. En ese sentido, subraya la importancia de mantener las respuestas a la creciente demanda social de los últimos años y resalta que el 25% del presupuesto está dirigido a Desarrollo Social. “Hoy el armado de un bolsón para la gente no solo se incrementó en unidad sino en el valor unitario de los productos”, acentúa.
“Por un lado cae la recaudación de los ciudadanos que dejan de pagar, y por otro lado tenés más erogaciones por demandas de vecinos que acuden al Municipio porque necesitan una ayuda”, dice, y explaya: “nosotros mantenemos el equilibro entre los ingresos y los gastos. El año pasado se produjo la quita del Fondo Federal Solidario, que tiene un impacto fuerte en obra pública. Después la quita de subsidios al transporte urbano de pasajeros, pero nosotros sostenemos el beneficio de un boleto subsidiado. Hay que crear ingeniería para sostener los servicios con menos ingresos”.
Además, Fernández valora la determinación de la gestión local en continuar con el plan de obras públicas a pesar de las dificultades económicas y el cimbronazo que la recesión produce en la ciudad. “Seguimos con muchos frentes de obras abiertos. A veces nos cuestionan por ser un gobierno que hace y no se queda quieto. Muchos gobiernos tienen paradas las obras, y nosotros seguimos con el mismo ritmo”, detalla Fernández, y completa: “los salarios tienen un fuerte incremento porque acompañaron la inflación, pero también los insumos críticos. Nosotros trasladamos a los ciudadanos la menor presión tributaria por decisión política”.
